El arco de la victoria

Relato de mis experiencias

     Luego de haber dado una gran vuelta por la costa norte de la isla, llega finalmente al peaje de Buchanan. El aire acondicionado le funciona mejor que nunca. Al menos eso siente. Y para concluir, el sonido de la radio le parece excelente.

     Debe ser el sentimiento de llegar al fin del pasadía lo que aumenta todas esas sensaciones que siempre existieron por todo el camino.

      Las cosas no le pueden estar marchando mejor, mientras que a su mano derecha se percata de un rotulo que lee “Autos de cambio carril derecho”.

     Pero envuelto en el extasías que desemboca el pensar que pronto dejara de manejar su auto. Alucina que frente a él se levanta un arco de la victoria, tan igual y majestuoso como se pueden encontrar en países alrededor de toda la Europa.

     Ya es un hecho, se encuentra en el medio de la fila. Ya se imaginaran…sin el dinero suficiente para pagar ese pase a la liberta absoluta de su espalda. Rebusca en sus bolsillos, debajo de los asientos, por todo el carro. Cenicero, alfombras, gabetas y por los lugares más estrechos entre sus asientos y la carrocería.

     Mientras, se mueven poco a poco hacia el cajero todos los vehículos que tiene de frente.

     Hasta que se cansa de rebuscar, y levanta la mirada en dirección a un rotuló bien grande que dice las tarifas según la cantidad de llantas. Lo mira y dice “Contra por el camino vi solo un rotulo que decía “Pronto el peaje”, pero nunca alguno que... Alguno grande , que me hubiese dicho la información de las tarifas para prepararme, maldita sea”.

     Apaga el auto y lo deja en plena fila, comienzan los bocinazos. Camina por todo el lugar hasta la oficina de autopistas para que le den un pase provisional.

      Y casi llegando a la puerta, escucha un sonido parecido al de unas monedas…viene de un lugar en su pantalón donde no pudo rebuscar con la prisa y la incomodidad.

     Ahí están, las monedas necesarias para devolverle su pase por el arco de la victoria.

El Arc de Triomphe de París, es quizá el arco de triunfo más famoso. Está ubicado en la plaza Charles de Gaulle, en el extremo oeste de los campos Eliseos.